jueves, 21 de abril de 2011

EL PLACER DE UN BUEN PENE

Hoy me acabo de comer una de esas espectaculares, lindas, divinas. El chango era este tipo deliciosísimo brasilero de esos machos que están llegando por montones, con cuerpo de jugador de rugby como mi preferido, Gareth Thomas. Me fui al cine center y me quedé como siempre, cerca de los urinales hasta que entró uno que tenía una mirada que lo que quería era más que mear. Y me dejé hacer de todo. Escribo esto para acordarme de la fecha exacta y de los detalles. Y encima estar en el baño de la esquina mientras todos los demás hacen sus cosas a tu alrededor. Bello y perfecto. Me dijiste que te llamas Rodolfo pero no me preguntaste mi nombre. 

Volveré ahí mañana de camino a mi práctica. Y ojalá vuelvas a hacerme lo mismo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario